SITUACIÓN HABITUAL (cruce de correos electrónicos entre dos compañeros):
– Por favor, pásame los datos de pedidos del último mes.
– (1 día despues) 227
– ¿Están solo los entregados o también están los que están en preparación?
– (1 día despues) Son todos los pedidos.
– Ya, los que necesito son los entregados.
– (1 día despues) 196
– Aquí veo que incluyes algunos de hace dos meses.
– Sí, porque se entregaron el mes pasado.
– Ya, pues los que necesito son los que se pidieron y se entregaron el último mes.
– (1 día despues) 123 sin reclamación y 12 con reclamación.
– 🤔
– (…)
SITUACIÓN MENOS HABITUAL:
– (presencial o por correo electrónico) Verás, estoy preparando un informe para el seguimiento de los tiempos de respuesta a los clientes y necesito algunos datos. La información también nos va a servir para el seguimiento del sistema de Calidad. ¿Puedes echarme una mano?
– (por correo electrónico/mensajería instantanea/teléfono -30 segundos-) Vente cuando puedas y vemos cómo lo montamos. Piensa si quieres o necesitas que venga alguien más.
– (1 día después, por correo electrónico) Adjunto enlace a archivo compartido en OneDrive que, como hablamos, actualizaremos mensualmente.
CONCLUSIONES:
- – Cuando contextualizo no veo solo tareas, veo también personas.
- – Cuando contextualizo enfoco.
- – Cuando contextualizo comparto información y/o conocimiento.
- – Cuando contextualizo abro la puerta a la verdadera colaboración.
- – Cuando contextualizo abro la puerta a la integración, a la participación y a la mejora continua.
- – Cuando contextualizo abro la puerta a la eficiencia.
- – Cuando contextualizo abro la puerta a la transparencia.
- – Cuando contextualizo doy pie al networking.
- – Cuando contextualizo estoy tratando a mis compañeros como seres humanos.
- – Cuando contextualizo no me comporto como un algoritmo; no te trato como un algoritmo.
Una respuesta a «Sin CONTEXTO somos algoritmos (=prescindibles)»